DU PREEZ, Amanda Anida. Gendered Bodies and New Technologies, Pretoria: University of South Africa, 2002. 

 

cover_GenderedBodiesEsta tesis doctoral publicada por la Universidad de Sudáfrica parte de la premisa de que el cuerpo es una condición indispensable de la vida humana y que, a diferencia de las posturas transhumanistas que buscan “trascender” el límite de lo corpóreo, no es posible concebir la vida humana sin este elemento material. Esto es de suma relevancia en un contexto en el cual las nuevas tecnologías tienden a la “digitalización” de la vida y, de este modo, a la reducción a información de ciertos aspectos que son considerados importantes y dejan de lado el cuerpo. Debido a esto, Du Preez se alinea con la postura ciberfeminista, la cual destaca el papel de la tecnología sin dejar de lado la importancia de cómo la manera material de estar en el mundo determina nuestras experiencias y, por lo tanto, nuestra existencia.

La sudafricana se centra en explorar cuatro formas de interrelación entre los cuerpos y las tecnologías que en ocasiones niegan y en otras afirman su presencia : la tecnología que permite trascender el cuerpo, el cuerpo modificado y aumentado tecnológicamente, el cuerpo marcado y el cuerpo cyborg. El análisis se centra en las representaciones de estas cuatro vertientes en el cine, la publicidad, el internet, la televisión y expresiones artísticas interactivas.

La primera relación que estudia es la que considera el cuerpo como un elemento no constitutivo de la identidad y que, por lo tanto, puede ser fácilmente sustituido por elementos inorgánicos debido a que lo que realmente importa es la mente. Un ejemplo de esta postura en la literatura es la novela de William Gibson Neuromancer (1984).

La segunda aborda el mejoramiento del cuerpo a partir de implantes, por lo que el cuerpo es una base sobre la cual hay que construir o mejorar. Como ejemplo toma personas amputadas que requieren de una prótesis o cirugía para seguir participando de forma activa en la sociedad. Sin embargo, también aborda la cirugía estética, cuyo objetivo es problemático en la medida en que busca perpetuar cierta forma de ideal.

La tercera relación se centra en la discusión del sexo y el género en el caso de los transexuales y los travestis, respectivamente. En este sentido, tanto la tecnología como las prácticas discursivas y la performatividad intervienen en la construcción de los cuerpos.

Finalmente, la cuarta relación es la del cuerpo cyborg, el cual se conforma a partir de elementos tanto orgánicos como inorgánicos. Un elemento central se vuelve entonces el carácter fragmentario y heterogéneo, sin olvidar que esta figura, tal y como la propone Donna Haraway, ha sentado gran parte de la base teórica de la postura cyberfeminista.

En términos generales, esta tesis ofrece una perspectiva interesante en cuanto a las distintas concepciones que se tienen del cuerpo a partir de su interrelación con la tecnología, por lo que el tema del aspecto material es en realidad bastante problemático y debe ser considerado con detenimiento en cuanto a la importancia que esto tiene para la confirmación de nuestra identidad y de un tipo de existencia que pudiéramos continuar denominando como “humana”.

Carla T. Morttiz